El viaje del coche y el tractor

Matheo y Kilian estaban preparados para salir de viaje en su coche. Estaban muy emocionados porque iban a visitar a su amigo Sebastian, que vivía en el campo.

Mientras conducían, vieron un tractor que les llamó mucho la atención. Decidieron seguirlo para ver a dónde iba.

De repente, el tractor se detuvo y de él salió un koala muy amigable. Matheo y Kilian se sorprendieron mucho, nunca habían visto un koala antes, pero rápidamente se hicieron amigos.

El koala les contó que había encontrado un mapa antiguo que indicaba la ubicación de un tesoro escondido en el bosque. Matheo y Kilian se emocionaron mucho y decidieron seguir al koala para buscar el tesoro.

Después de caminar un rato, llegaron a un puente colgante que debían cruzar para llegar al bosque. El koala les advirtió que el puente era muy viejo y que debían tener mucho cuidado al cruzarlo. ¿Lograrán llegar al tesoro sin que el puente se rompa?

Matheo y Kilian caminaron con mucho cuidado, siguiendo al koala por el puente colgante. El puente crujía y se movía, pero ellos se mantenían firmes. De repente, escucharon un crujido fuerte y el puente se rompió. ¡Pero justo en ese momento, un grupo de pájaros llegó volando y los ayudaron a llegar al otro lado!

Una vez en el bosque, el koala los guió hasta una cueva escondida donde encontraron un cofre lleno de monedas de oro y gemas preciosas. Se abrazaron de felicidad y agradecieron al koala por llevarlos hasta allí. ¡Habían encontrado el tesoro!

Regresaron al coche con una sonrisa en el rostro, sabiendo que habían vivido una gran aventura y que ahora tenían un montón de tesoros para compartir con su amigo Sebastian. Fue un viaje inolvidable que siempre recordarían con alegría.