Había una vez un ojo llamado Prez que vivía en el país de las Miradas Mágicas. Prez no era un ojo cualquiera; podía ver más colores que nadie y siempre estaba buscando algo nuevo que descubrir.
Un día, mientras exploraba el Gran Valle Verde, Prez vio a lo lejos unas rayas que se movían. Era Danna, la cebra, jugando entre las hojas de lechuga y las zanahorias silvestres. "¡Hola, Danna!" saludó Prez, moviéndose de un lado a otro emocionado.
Danna sonrió y le dijo: "¡Hola, Prez! ¿Qué te trae por aquí?" Prez respondió, "Estoy buscando algo sorprendente para ver. ¿Tienes algo así?" Danna pensó por un momento y luego dijo, "Tengo un regalo especial para ti."
La cebra llevó a Prez a un lugar secreto del valle, donde había una ensalada enorme, pero no era una ensalada común. Las hojas de lechuga brillaban como esmeraldas al sol, las zanahorias parecían pequeñas torres anaranjadas, y los tomates eran como rubíes redondos y jugosos.
"Esta ensalada es mágica", explicó Danna. "Si comes un poco de ella, podrás ver aún más colores en el mundo". Prez no podía creer lo que oía. Saltó de alegría y probó un bocado de la ensalada. De repente, su visión se llenó de colores nuevos y hermosos. Había tonos que nunca había imaginado.
Prez estaba tan feliz que decidió compartir su regalo mágico. Llamó a su amiga LEYDY, una pequeña mariposa, y juntos compartieron la ensalada con todos los animales del valle. Desde ese día, el valle se convirtió en el lugar más colorido del mundo.
Gracias a Danna y su regalo, Prez había descubierto que compartir hace que las sorpresas sean aún más especiales. Y todos vivieron felices, disfrutando de los colores que Prez les había mostrado.